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El misterio y el encanto de Dubrovnik

Hace muy pocos años hablar de Croacia era sinónimo de guerra. La terrible situación que vivieron los habitantes de la antigua Yugoslavia hicieron popular el nombre de un lugar que ha sabido recomponerse de manera completa a uno de los peores momentos de su historia.

La cosa cambio totalmente y hoy Dubrovnik es una de las ciudades más visitadas de toda Croacia, centro turístico ideal para muchos visitantes desde hace algunos años, sorprende por su belleza, su historia y su personalidad.

dubrovnik croacia El misterio y el encanto de Dubrovnik

Resulta complicado definir qué es lo que se siente al pasear por sus calles, por el barrio de Stari Grad, el casco viejo de Dubrovnik. Cada rincón desprende cultura, quizá sin saberlo, pero logra transmitir al turista según pone un pie en la ciudad que se conoce como la Perla del Adriático.

Turismo de calidad

Podríamos decir incluso que Dubrovnik es el destino de aquellos que buscan un destino vacacional con glamour, no en vano, muchos de los que la eligieron hace tiempo fueron personajes de la talla de Truman Capote, Aristóteles Onassis o Winston Churchill.

Sus playas son completamente distintas a las de cualquier otro destino europeo, incluso del mundo, ya que el color azul intenso de su mar, es imposible de ver en cualquier otro punto de la tierra.

Un lugar idílico que consigue aunar todo lo que cualquier persona desea para escaparse durante sus vacaciones: ocio, gastronomía, sol, cultura, belleza, historia…

Belleza y cultura en cada rincón

Nada falta en Dubrovnik para hacer feliz al turista, algo de lo que además se encargarán sus habitantes, que se muestran amables y hospitalarios, intentando hacer la estancia para todos los que vienen de fuera, una experiencia inolvidable.

La ciudad está rodeada por una espectacular muralla de casi dos kilómetros, que fue construida en el siglo XIV para mantener Dubrovnik protegida.

Desde el adarve de la fortificación se puede tener una panorámica maravillosa del casco histórico.

La mejor manera de conocer Dubrovnik es comenzando por la puerta de Pile, y su imperioso puente de piedra. Una vez se entra por esta zona, el resto sólo conseguirá maravillarnos aún más, ya que ante nuestros ojos se mostrarán palacios bellísimos, iglesias y monasterios pertenecientes a distintas órdenes religiosas, una sinagoga, una mezquita y una iglesia ortodoxa, plazas y calles rodeadas de espectaculares edificios.

Entre las visitas que no pueden faltar se encuentran las del palacio Sponza, que data del siglo XIV; la catedral y su tesoro; la fuente de Onofrio o la calle central de Placa.

Foto de Łukasz Bolikowski en la Wikipedia.

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