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¿Y las maletas?

Una de las grandes preocupaciones cuando realizamos un viaje en avión no es perder el avión, sino que al llegar a nuestro destino, nos hayan robado las maletas.

El peso máximo que exigen las compañías para no pagar un exceso de equipaje, no nos resulta suficiente, por lo que acabamos metiendo a presión y como si de un tetris se tratara todo aquello que queremos llevarnos de viaje. En el caso de que después no la veamos salir por la cinta transportadora conseguirá que el mundo se nos venga encima, porque lo más probable es que lo hayamos perdido todo.

La primera sensación es de angustia, que poco después se transforma en estrés, para pasar a ser incredulidad y falta de capacidad de reacción porque no se sabe dónde acudir.

Mantener la máxima tranquilidad

Hoy queremos mostraros cuáles son los pasos a seguir en el caso de que se produzca este terrible contratiempo.

En primer lugar se debe mantener la calma, no estás sólo, otro importante número de viajeros está igual de cabreado que nosotros porque también les han perdido las maletas, así que plantarse en el mostrador de la compañía de turno dando gritos, no soluciona el problema. Están acostumbrados.

Un dato que puede tranquilizar es que alrededor de un 90 % del equipaje que se pierde es recuperado tarde o temprano. Eso sí, aunque no se den gritos, no se debe dejar de insistir al personal responsable del aeropuerto que queremos que nos devuelvan la maleta.

El 90% de las maletas se devuelven

Al llegar al mostrador de la compañía con la que hemos volado, lo primero que tenemos que hacer es pedir el formulario P.I.R. (Parte de Irregularidad de Equipaje). En otros países se llama de otro modo, pero será fácil que nos entiendan, nuestra cara lo dirá todo.

Como para casi todo en esta vida hay plazos, si te pierden las maletas también. Así que no lo dejes porque las reclamaciones son sólo válidas durante 10 días para vuelos nacionales y una semana para los internacionales.

Existen unas indemnizaciones en caso de pérdida o deterioro, que están reguladas de manera internacional por el Convenio de Montreal de 1999 y, a nivel nacional, por la Ley de Navegación Aérea y el Real Decreto 37/2001.

Lo habitual es que las compensaciones económicas que nos ofrece la compañía resulten insuficientes. Aproximadamente 19 € por Kg facturado hasta un máximo de unos 560 €, es el importe que pagará la compañía en vuelos nacionales. En vuelos internacionales según el país al que se viaje, están en torno a los 28 € por Kg hasta un máximo de 1.100 €.