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La valla más sexy del mundo

¿Has visto valla más curiosa que esta?

A veces, las ocurrencias de la gente dan lugar a los resultados más curiosos. Son muchos los casos en los que, a base de colocar cosas concretas en un lugar, eso se acaba convirtiendo en una especie de tradición: candados en puentes, piezas de tela en árboles… o un caso ciertamente curioso, sostenes en una valla.

Cardrona Bra Fence 306x460 La valla más sexy del mundoPues en Cardrona, en Nueva Zelanda, existió la llamada “valla de los sostenes”. En dicha valla, que separaba una finca privada de la carretera adyacente, un día de diciembre de 1999 aparecieron colgados cuatro sostenes por algún ignoto motivo. Como suele pasar, sólo hace falta que alguien comience con una idea curiosa para que los demás lo imiten, aunque no sepan por qué: en un par de meses la valla había acumulado unos 60 sostenes y la historia llegó a la prensa neozelandesa.

Fue entonces cuando la popularidad del lugar se disparó y la gente empezó a colgar más y más sostenes en la valla, convirtiéndola finalmente en una verdadera atracción turística. En menos de un año había más de 200 sostenes colgados, y en 2006 el número había ascendido hasta casi 800. La historia llegó incluso a los medios de comunicación europeos y americanos, habiendo gente que incluso mandaba sus sostenes por correo para que alguien los colgara por ellas.

Aunque una parte de los habitantes locales estaban contentos con la iniciativa porque pensaban que podía atraer turistas a la región, otros no estaban tan de acuerdo. La razón principal es que consideraban que la valla distraía la atención de los conductores y podía provocar accidentes. También consideraban que había habitantes de las islas pertenecientes a otras culturas que podían sentirse ofendidos al ser sus sociedades más pudorosas por lo que respecta a la ropa interior. Por una razón u otra, el consejo local decidió ordenar la retirada de los sostenes, a pesar de que, según un granjero que ejercía de vigilante no-oficial de la valla, la mayoría de las opiniones recibidas al respecto eran positivas.

Pero la llama siempre arde más brillante antes de apagarse, y este hecho disparó la popularidad de la “valla de los sostenes”. La gente intentó entonces hacerla pasar a la posteridad en el Libro Guinness de los Récords, creando la cadena de sostenes más grande del mundo. Finalmente se quedaron cortos, pero llegaron a la espectacular cifra de unos 7400 sostenes, los cuales al ser retirados se vendieron por un total de más de 10.000 dólares que fueron destinados a la caridad; un final más que loable para este curioso reclamo turístico.

Fotografía de Ingolfson en Wikipedia.

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