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Las termas del infierno

¿Te bañarías en una piscina de sangre?

Ante todo, tranquilidad: Hoy no vamos a hablar de ningún ritual satánico ni tampoco de una macabra atracción turística. El nombre es un simple reclamo, aunque muy ajustado a la realidad: un infierno de calor y agua del color de la sangre. Así son las termas de Beppu, en la isla japonesa de Kyushu.

Termas de Beppu Chinoike Jigoku 460x306 Las termas del infierno

Beppu es conocida como la ciudad balneario, ya que cuenta con más de 100 establecimientos de este tipo, siendo una de las tres grandes áreas termales de Japón. De entre estos, los más famosos son los llamados “nueve infiernos” (a veces ocho), nueve lagos termales con características muy peculiares que recuerdan, verdaderamente, a un infierno.

El más famoso y espectacular es seguramente el “chinoike jigoku” o infierno de sangre, cuyas aguas son de color rojo a causa de las sales de óxido; esto, unido al vapor que domina el ambiente, da la impresión de encontrarse verdaderamente en el infierno. También las sales dan nombre al “shiraike jigoku” (infierno blanco) y al “umi jigoku” (infierno del mar, por el color azul de sus aguas). Otros estanques impactantes son el “oniishibozu jigoku” (“el infierno de la coronilla del monje” por las grandes burbujas que se forman en la superficie) y el “tatsumaki jigoku” (“el infierno de los géiseres”, por los chorros de agua caliente que brotan cada media hora).

Los otros, no tan famosos, son el “yama jigoku” (infierno de la montaña; cerca se encuentra un pequeño zoo… esperemos que los animales estén habituados al calor), el “oniyama jigoku” (infierno del demonio de la montaña), el “kamado jigoku” (caldera del infierno) y por último el “kinryû jigoku” (infierno del dragón dorado, por una estatua colocada en él), a veces no incluido como uno de los famosos infiernos.

Curiosamente, por sus efectos terapéuticos debería definirse como un paraíso más que un infierno, ya que están consideradas entre las mejores termas de Japón gracias a su elevado contenido en sales minerales (las cuales les dan sus colores característicos). Las aguas termales son una gran fuente de riqueza para la ciudad y la región. ¿Quién dijo que el infierno era un mal lugar? Caliente, eso sí… pero no un mal lugar. Al menos, el de Beppu.

Fotografía de 663highland en la Wikipedia.

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