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Schilthorn Piz Gloria, licencia para asombrar

No es ningún secreto que el cine es un gancho fantástico para el turismo. Los paisajes del Señor de los Anillos en Nueva Zelanda son el ejemplo más claro, pero también hay lugares menos conocidos (por ser apariciones más fugaces) que aprovechan el tirón del cine lo mejor que pueden.

Uno de estos lugares es el restaurante Piz Gloria, situado en la cima del pico suizo del Schilthorn. Este apareció en varias escenas del filme de James Bond Al servicio de Su Majestad como la base de Blofeld, el villano de la película. De hecho, en una de las plantas del Piz Gloria hay un pequeño “museo” de James Bond en el cual, entre otras cosas, se pueden ver las escenas de la película rodadas en el Schilthorn y en el propio restaurante (la más famosa de las cuales es en la que Bond desciende en esquí por la ladera de la montaña).

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Precisamente el esquí es otra de las actividades en las que el Schilthorn es famoso, pues es el punto de partida de las dos competiciones deportivas más importantes de la región de la Jungfrau: la carrera de esquí alpino Inferno en invierno y el Triatlón Inferno en verano, cuyos nombres hacen honor a su dureza. Es también un popular punto de partida para los esquiadores más experimentados, pues se trata de pistas negras que discurren cerca de los barrancos. Ya sólo el espectacular trayecto en teleférico desde Mürren, cruzando el vacío, es algo que quita el hipo.

Por su lado, el principal atractivo del Piz Gloria es que se trata de un restaurante giratorio: el suelo se va moviendo lentamente hasta dar la vuelta completa al impresionante panorama que hay más allá de las ventanas: desde las más cercanas cimas del macizo de la Jungfrau, hasta los lejanos picos del Mont Blanc, las montañas de Jura y la Selva Negra. Comer en él es un capricho que te puede salir algo caro, pero que resultará inolvidable para ocasiones especiales, especialmente al atardecer, cuando las montañas se tiñen con tonos anaranjados.

Schilthorn y Piz Gloria, la montaña y el restaurante, forman un conjunto indivisible en el que uno no puede entenderse sin el otro. Un lugar mágico con licencia para asombrar.

Fotografía de Jackph en la Wikipedia.

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