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Salou y el turismo
Hoy, día de Reyes, mucha gente habrá recibido más de un regalo. Quizás los Reyes Magos de Oriente sólo te han traído carbón, o probablemente la suegra te ha comprado los calzoncillos de moda o no tan de moda de esta temporada; definitivamente éste es un presente que nunca falla. No obstante, a lo mejor, si has tenido un poco de suerte, has sido agraciado con una estancia en cualquier hotel del país gracias a la sensación del momento en cuestión de regalos: las cajas con obsequios que explicamos días atrás. Si no sabes aún el destino te propongo uno que es un clásico: la localidad catalana de Salou, en la provincia de Tarragona.
Considerada la capital de la Costa Dorada por su condición de destino turístico, Salou es actualmente uno de los principales lugares turísticos de la costa mediterránea en verano. Sin embargo, también lo es en primavera u otoño gracias a la bonanza de su clima, suavizado por la cercanía del mar que modera las temperaturas durante prácticamente todo el año.
Salou disfruta, por tanto, de una de las temporadas turísticas más largas de España. Desde marzo a noviembre aproximadamente, Salou es visitado por turistas de todas las nacionalidades, aunque es en verano cuando obviamente el volumen de viajeros llega al límite. Una de las razones de la afluencia de turistas a la zona, es sin duda, la existencia del parque temático Port Aventura, catalogado en 2002 por la prestigiosa revista de ocio Amousten businnes como el mejor parque temático del mundo.
Turismo nacional e internacional
Aunque con gran afluencia de visitantes durante todo el año, es diferente viajar a Salou en verano que a finales de marzo o abril. Si decides reservar tu regalo hasta los meses de calor, el sol y las playas no te faltarán, además de un ambiente nocturno importante gracias a la existencia de variados pubs y discotecas. Mientras que muchos de estos locales suelen adaptarse a la música y gustos de los jóvenes ingleses, alemanes o franceses, otras son de carácter más nacional, con música y ambiente para turistas españoles.
Si, en cambio, decides aprovechar el regalo yéndote a Salou dentro de un par de meses, el bullicio de julio, agosto o septiembre será prácticamente inexistente. Dar una vuelta por el paseo marítimo con la panorámica de la playa acompañándote a lo largo del recorrido será mucho más agradable en esta época. Lo mismo pasará con las tiendas y los hoteles; todo estará un poco más vacío y, por consiguiente, todo será mucho más relajado y menos estresante.
Dos formas posibles de vivir Salou, una localidad que aunque reconocida por su turismo tiene dos maneras de entenderse. Sea la temporada que sea, visítala y recorre el largo paseo marítimo con la Playa de Levante como protagonista. En ella, por cierto, no debes perderte, en caso de viajar en verano, los populares fuegos artificiales celebrados la noche del 15 de agosto. Un juego de luces y colores en la oscuridad del cielo de Salou que te sorprenderán por su belleza mientras los observas sentado en la arena de esta misma playa.
