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Ôsaka en un día

Si bien las dos ciudades más conocidas de Japón por los turistas son Tokyo y Kyoto, hay otras muchas que injustamente pasan a un segundo plano. Una de estas se encuentra muy cerca de Kyoto con el tren bala (y no tan lejos en tren convencional) y merece aunque sea una visita de un día: Ôsaka.

Castillo de Osaka 344x460 Ôsaka en un día

Ôsaka es una ciudad que destaca por su gran cantidad de comercios, grandes y pequeños, y pasear por sus calles es un placer en sí mismo. Sin embargo, hay tres lugares que no puedes perderte en una escapada de un día a Ôsaka.

El primero de ellos es la Tsûtenkaku, la torre más famosa de la ciudad. Así como Tokyo y Kyoto tienen las suyas, Ôsaka no podía ser menos; aunque su nombre (la torre que alcanza el cielo) es bastante exagerado para sus 103 metros de altura. Esta es en realidad la segunda torre, pues la primera (que imitaba el aspecto de la Torre Eiffel) fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial. La nueva torre se inauguró en 1956 y presenta un aspecto más moderno, en conjunción con el lugar donde se ubica: Shinsekai, un animado barrio popular.

El segundo hito imprescindible es el Castillo de Ôsaka, uno de los más impresionantes de Japón y todo un símbolo de la unificación del país. Su construcción empezó en 1583 por orden de Hideyoshi Toyotomi, que puso fin a la llamada “era de las guerras civiles” y pronto desembocaría en un Japón unido tras décadas de luchas entre los señores feudales. El castillo se puede visitar y, aunque requiere un buen rato, lo merece con creces pues por algo es uno de los más famosos castillos japoneses. Su rasgo más característico, los tejados color turquesa rematados por estatuas de oro que representan carpas, un pez muy presente en la simbología japonesa y al que la cultura popular asocia con la buena suerte.

¿Y qué mejor para acabar el día que una panorámica de la ciudad con la puesta de sol de fondo? El lugar ideal para ello es el Umeda Sky Building. Este rascacielos inaugurado en 1993, cuyas paredes espejadas reflejan la luz solar, consiste en dos torres de 173 metros unidas en su punto más alto, el observatorio del tejado. Animaos a subir por las futuristas escaleras mecánicas. Desde esa altura se pueden observar unas fantásticas vistas de la ciudad, así como de la bahía de Kobe a lo lejos, y en las horas del atardecer el espectáculo te deja sin aliento (y nunca mejor dicho, a causa del fuerte viento que sopla).

Ôsaka es una ciudad fantástica y estos son tan sólo sus tres lugares más emblemáticos. Pero si viajas al país nipón, no dudes en pasar un par de días por ella: a bien seguro, no te arrepentirás.

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