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Micromundi, museo de miniaturas

¿Se puede ver un tren pasando por el ojo de una aguja?

Siete camellos, un hombre y un oasis: todo eso cabe dentro del ojo de una aguja. ¿Cómo conseguirlo? En caso de no tener una aguja gigante, tan sólo queda la opción de reducir todos los elementos a un tamaño muy muy pequeño. Para verlo tan sólo tienes que acercarte al museo Micromundi, el museo de miniaturas y microminiaturas de Besalú.

No te preocupes si no puedes presumir de una vista de lince: las cinco salas de este museo tienen sus obras expuestas con un microscopio. Durante el tiempo que dure tu visita por Micromundi tendrás que ir mirando a través de esas herramientas de laboratorio para poder descubrir qué se esconde en el ojo de una aguja, en la semilla de una manzana o en la cáscara de una nuez.

L 9 460x306 Micromundi, museo de miniaturas

Micromundi se encuentra en el municipio de Besalú, en la casa conocida como Cal Coro. Se trata de una antigua fábrica textil que tuvo que ser acondicionada y restaurada (respetando la idea original) para poder albergar esta colección tan singular. Un viaje a otro mundo donde la imaginación y la curiosidad son los elementos claves para sorprenderse con lo que allí se expone.

La visita a Micromundi permite descubrir un conjunto de más de 2.000 piezas de diversas temáticas realizadas por artistas de varios puntos del mundo. Se exponen al público en un espacio de 400 metros cuadrados, presentadas en tres salas que suponen al mismo tiempo tres niveles de observación. En una primera sala podrás disfrutar de las miniaturas, para pasar después a una segura de miniminiaturas y terminar finalmente en la tercera sala de microminiaturas del museo Micromundi.

Todas las obras expuestas en Micromundi tienen un gran valor artístico y una gran dificultad técnica, hay que tener mucha habilidad y creatividad para poder realizar esas piezas tan singulares. En la primera sala se exponen una colección de comercios en miniatura. Es tu oportunidad para contemplar una farmacia del siglo XIX o una tienda de ultramarinos. En la sala de miniminiaturas, con la ayuda de la lupa incorporada en la vitrina, podrás ver escenas tan curiosas como a Pinocho y Gepeto dentro de una cáscara de pistacho, o un elefante equilibrista en la punta de una aguja. La tercera sala es ya el mundo de lo verdaderamente imposible, las microminiaturas. Un conjunto de joyas que no le servirían ni a una hormiga sobre la pepita de una manzana o una reproducción de la torre Eiffel construida sobre una semilla de amapola son algunas de las piezas que podrás ver en esta última sala de Micromundi.

Fotografía de la web oficial de Micromundi 

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