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Una auténtica ola en el desierto

A veces el mundo ofrece parajes tan espectaculares que parecen de otro planeta. Éste, sin duda, podría ser uno más de ellos, y es que su singularidad lo hace único en el mundo. Se trata de un lugar desértico, árido y con pocas muestras de que pueda haber agua. Sin embargo, la naturaleza se ha encargado de modelar unas formaciones rocosas que sorprenden por su impactantes formas, totalmente imposibles de creer si no es viéndolas en vivo y en directo.

¿Qué dirías si te dijera que se puede ver una ola en el desierto? Pensarás que, a menos que haya un oasis, cosa que tampoco garantiza que pudiera haber tanta agua para formarse olas, es imposible encontrarse este tipo de movimiento del agua en pleno territorio desértico.

Sin embargo, como decía, la propia naturaleza se ha encargado de ir creando con el tiempo una gigante ola en el desierto, eso sí, una ola petrificada, pues está formada por las propias rocas del corazón del desierto de Arizona, pareciendo un auténtico oleaje típico de un mar revuelto.

Este especial paraje se encuentra en el área protegida de Paria Canyon-Vermilion Cliffs Wilderness, al norte de Arizona. Se trata de un Parque con una protección especial puesto que además de la ola en el desierto, se encuentran otro tipo de formaciones que merecen un especial cuidado. El paso de los años ha sido el causante de estas maravillas rocosas, pero también podría significar su desgaste si la gente pudiera visitar esta zona más frecuentemente y sin ningún tipo de restricciones.

Ha sido exactamente la erosión del viento lo que ha ido creando esta ola en el desierto, una estructura natural de piedra arenisca y de débil consistencia, por lo que cualquier variación del viento puede provocar cambios considerables. Una mezcla única de colores amarillos, rojos y rosados harán de la sensación de estar viendo una ola una experiencia aún más creíble.

Para llegar hasta esta ola en el desierto deberás dirigirte hacia la entrada a este Parque y desde allí realizar una intensa excursión de una hora, siendo casi necesario ir acompañado de un guía. Se recomienda, además, visitar la ola en el desierto y el conjunto del Parque en primavera u otoño, pues en verano el calor puede hacer la excursión muy pesada.

Fotografía de la página del Parque