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Grgur Ninski, la estatua del obispo de la fortuna
Una estatua de la que se dice que atrae la fortuna si la tocas en una determinada parte: esta es una historia que se repite en muchas ciudades. Split, en Croacia, no es una excepción, y en el exterior de sus antiguas murallas encontramos la gran estatua dedicada a Grgur Ninski (Gregorio de Nin). Otras estatuas suyas pueden verse en Nin (su ciudad natal) y en Varaždin, pero esta es la más famosa.
Grgur Ninski es un personaje muy famoso en la historia de Croacia. Fue un obispo que vivió durante el siglo X y que introdujo el lenguaje croata en las misas. En aquellos tiempos el Vaticano estaba tratando de evangelizar el territorio de los Balcanes y la gente estaba obligada a asistir a misa; esfuerzos que no tenían mucho éxito, pues las misas se daban en latín y la mayoría de la gente no las entendía. Grgur Ninski logró con su iniciativa aumentar la influencia del catolicismo y, sin embargo, su postura le valió la enemistad del Papa y la iglesia vaticana, que consideraban que la misa solía podía darse en latín y no en las lenguas “vulgares”.
La estatua que hay en Split refleja perfectamente su postura desafiante. Originalmente estaba situado en el Peristilo del Palacio de Diocleciano, en el corazón del casco antiguo de Split, pero durante la Segunda Guerra Mundial las fuerzas italianas la sacaron de la ciudad. A su regreso, fue colocada frente a los jardines de la puerta norte de las murallas, la llamada Puerta Dorada (nombre simbólico, pues al menos a día de hoy no es dorada).
En este caso, el dedo gordo del pie izquierdo es la parte que debe tocarse para que te traiga fortuna; no me preguntes por qué esa parte ni por qué se supone que debe traerte suerte, nunca se molestan en explicar esta parte. Como suele pasar en las estatuas de bronce, la parte en cuestión ha perdido la capa externa y se ha vuelto dorada. ¿Tal vez por eso se dice que atrae la fortuna, por el color del oro?
